Es considerado un valioso objeto de instrucción que muestra el funcionamiento del Sistema Solar. Está construido con estructuras de bronce sobre una base de madera ebonizada torneada y fanal de vidrio, realizado en Inglaterra durante el siglo XIX. Funciona mediante un conjunto de engranajes que ilustran las posiciones relativas y los movimientos de los planetas y la luna alrededor del Sol. También muestra el tamaño relativo de estos cuerpos entre sí.
El cáliz es una copa sagrada utilizada en la liturgia para consagrar el vino. Este objeto, de metales nobles y ornamentación detallada, simboliza la sangre de Cristo. Muchos cálices antiguos fueron elaborados por orfebres anónimos, pero su nivel de detalle revela el estatus y devoción del comitente.
Una casulla es una vestimenta litúrgica usada por los sacerdotes durante la celebración de la misa en la tradición católica. Es una prenda sin mangas, de forma ovalada o con abertura en los brazos, que se coloca sobre los demás ornamentos sacerdotales. Su origen se remonta al mundo romano, donde era una capa común, y con el tiempo fue adoptada por la Iglesia.
Entre las piezas más impresionantes del arte litúrgico, la custodia ocupa un lugar central. Su forma radiante no es solo estética: simboliza el sol que contiene lo más sagrado, la presencia viva del misterio.
Hecha para sostener la hostia consagrada durante la adoración, la custodia es un objeto que une arte, fe y devoción. Sus materiales nobles—oro, plata, piedras—no solo reflejan riqueza, sino una intención profunda: honrar lo invisible.
Hecha para sostener la hostia consagrada durante la adoración, la custodia es un objeto que une arte, fe y devoción. Sus materiales nobles—oro, plata, piedras—no solo reflejan riqueza, sino una intención profunda: honrar lo invisible.